Stephanie Doody, de 55 años, afirma que sus gatos Rennie, Dinky y Jaffy le salvaron la vida, según comenta por "oler" el cáncer. Al parecer todo comenzó cuando sus gatos empezaron insistentemente a fijar su atención en el abdomen de la señora. No tenía síntomas de la enfermedad, pero sus tres amigos felinos insistían en dar cabezazos en su abdomen.
Su médico más tarde descubrió un tumor en su apéndice, un cáncer poco común pseudomixoma peritoneal, que en general no suele presentar síntomas y, normalmente, no se diagnostica hasta ser demasiado tarde. En febrero de 2014 sus tres felinos empezaron a notar que algo no estaba bien, y seis meses después fue intervenida en una complicada operación de 12 horas.
Su médico más tarde descubrió un tumor en su apéndice, un cáncer poco común pseudomixoma peritoneal, que en general no suele presentar síntomas y, normalmente, no se diagnostica hasta ser demasiado tarde. En febrero de 2014 sus tres felinos empezaron a notar que algo no estaba bien, y seis meses después fue intervenida en una complicada operación de 12 horas.
La señora Doody afirma que sus gatos
le salvaron la vida, ellos de alguna forma olían el cambio molecular
en su cuerpo, un olor diferente que llamaba la atención de los
felinos. Durante un tiempo sus gatos la seguían, aunque esto es
normal, la insistencia y durante meses quedarse con ella donde fuera,
consiguió llamar la atención de Stephanie alertando y acudir a su
médico. Cuando todo terminó y regresó ya operada sus gatos según
la señora Doody se sentían aliviados, como si estuvieran diciendo
"por fin lo han descubierto".
